Marsella es la segunda ciudad más grande de Francia, igual de encantadora durante las cuatro estaciones. Cuenta con un rico y diverso patrimonio cultural gracias a sus 2.600 años de historia. Explore Marsella desde el distrito de Panier hasta el pequeño pueblo intacto de Goudes, desde el edificio Mucem hasta Vieille Charité, desde la imprescindible Notre-Dame de la Garde hasta la deslumbrante Cité le Corbusier. Si pasa por la mañana por el Puerto Viejo, uno de los símbolos turísticos de la ciudad, seguramente encontrará a ruidosos pescadores vendiendo pesca fresca. Precisamente aquí comienza la famosa "calle del cáñamo" de un kilómetro de largo, Rue La Canbière, cuyo aspecto se remonta al siglo XIX, cuando Marsella era uno de los centros comerciales de cáñamo más grandes del mundo.

La vida nocturna de esta mágica ciudad es muy rica, y también hay una gran cantidad de restaurantes donde puede probar especialidades de pescados y mariscos. Cuando se cansa de caminar y pasear por esta ciudad inusual, puede visitar una de las muchas playas de la ciudad y disfrutar del clima mediterráneo y la vista del mar turquesa.

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